lunes, mayo 14, 2012

Ismael Serrano - Todo empieza y acaba en ti.



Elige un punto de tu mundo o de tu vida. Ese punto será el punto de partida. Traza un una línea infinita que sea el trayecto: serán las curvas del cuerpo de la mujer a la que amas (o el hombre al que amas). Anda con vértigo por esa línea que es un trayecto, sin red ni salvavidas. Ni paracaídas. Escucha "Te odio" para sacudirte de una la parte de ti que hasta tu sombra repugna. Contra el miedo, canciones. Contra la crisis, canciones. Mantén tu equilibrio con "Te debo una canción", acostúmbrate a ese vértigo de déficits y disfruta con ello. Que te ladren, tú cabalga. Contra la falta canciones. Contra la ausencia canciones. Ponte "Semana" y agárrate con todas tus fuerzas a ese susurro atávico de Ismael. Sigue con paso firme tu semana y tu trayecto. Contra la nostalgia, poesía hecha canción. Sigue adelante, prefiero a un hombre derrotado que a un hombre sin alma. No dejes de oír "Yo era un hombre solitario" una canción con alas arañadas de novela. Contra la soledad, literatura hecha canción. No te pares, continúa con "Por fin te encontré" porque nada está perdido, porque nunca necesitaste un rastro para encontrarla, ni un camino de baldosas amarillas. Contra la pérdida, canciones. Contra el silencio canciones. Sigue por ese trayecto infinito que dibujaste y oye "Con una pena de muerte" para maldecir las injusticias y las pesadillas, los traumas y el azufre en las heridas. Contra el dolor canciones. Para luego ir en tu andar seguro escuchando "Habrá que someter a Referéndum" con el fin de ahogar tristezas y amarguras, para tomarle aire y granos de arena al reloj de arenas movedizas en el que te hundes. Tu salir de corazón te sacará a flote. Contra este otoño de libros, canciones. Entonces escucha "Despierta"  que ya estás en el abril de tu camino, continúa tu trayecto aunque estés agotado, supera las cortinas de humo de tu camino. Contra la fatiga, canciones. Y "Mientras tú llegas" me inyecto como droga las agujas del reloj de tu tiempo sin ti. Acaba tu trayecto. Marca con una X el final (la X siempre marca el lugar). Si es donde empezaste puedes decir que "Todo empieza y todo acaba en ti". Seguiste el camino correcto.